Por: Redacción.
A diez aumentó el número de personas que murieron y 87 más resultaron heridas por la explosión de un carro-bomba frente a la Escuela de Cadetes de Policía General Santander, en Bogotá, Colombia, informó el Ministerio de Defensa en un comunicado.
El presunto responsable fue identificado por la fiscalía como José Aldemar Rojas Rodríguez, quien llegó hasta la portería conduciendo una camioneta gris Nissan Patrol cargada con 80 kilos de pentolita.
Al ser detenido por los controles de seguridad, aceleró el vehículo y lo estrelló contra una pared, haciéndolo explotar.
Las víctimas fatales son algunas de las estudiantes de la escuela de la Policía que estaban en la entrada de esa edificación, y también los agentes que perseguían al agresor.
Atentado suicida
Fanny Contreras, funcionaria de salud de las Fuerzas Militares, señaló que un vehículo irrumpió “abruptamente” en la sede policial.
“Entró abruptamente, casi atropellando a los policías y enseguida fue la explosión”, comentó Contreras.
Colombia no se amedrenta
El presidente Iván Duque, condenó enérgicamente el atentado terrorista contra la Escuela General Santander en Bogotá.
“Es un ataque contra toda la sociedad, este ataque no quedará impune”, aseveró.
El mandatario aseguró que la investigación para dar con los responsables está en curso, pero pidió la máxima colaboración de los colombianos y ordenó el despliegue de todas las autoridades para dar con los responsables.
“Hago un llamado a los colombianos para que nos unamos en contra de los violentos. Todos juntos, sin ningún, distingo debemos apoyar”, dijo Duque.
El mandatario puntualizó: “Vamos a actuar con toda la firmeza, todos los colombianos debemos estar atentos a contribuir con información para desarticular a la estructura criminal responsable de este hecho”