Por: Redacción.

El director para las Américas de Human Rigths Watch, José Miguel Vivanco cuestionó que el general Nicasio Martínez Espinel, actual comandante del Ejército, “celebrara una operación militar de hace más de 10 años en la que murió una menor indígena”.

“El caso sucedió entre 2004 y 2006, él era el segundo comandante de la décima brigada blindada, que operaba en el Cesar y La Guajira”, aseguró el director de la ONG.

La niña indígena murió a raíz de una operación militar del batallón La Popa. “La asesinaron estos soldados que estaban bajo la dirección de la décima brigada blindada”.

La denuncia de Vivanco está contenida en un informe en el que se da cuenta que el general Martínez “firmó un documento en el que autoriza el pago de una recompensa de 1 millón de pesos por los excelentes resultados de esta operación”.

Explica José Miguel Vivanco que el general en mención aprueba la operación, luego aprueba la recompensa de un millón de pesos a los que aportaron la información que termina con el asesinato de una menor indígena, y luego califica, algo que está firmado por el actual general, como “excelentes los resultados de esta operación”.

Dijo que si bien no está considerando esto como la prueba maestra que sirva de condena para el actual comandante del Ejército, si es un antecedente que se debe tener en cuenta, aseguró Vivanco.

“Me pregunto si el ministro de Defensa, Guillermo Botero, y el presidente, Iván Duque, sabían o no sabían de este documento y aun así lo promovieron como comandante del Ejército”, expresó.