Por: Redacción.
Todo un drama tuvo que vivir la modelo Negzzia para llegar a la cima. En una reciente entrevista a Efe, la modelo narró que probó suerte en Turquía luego de esperar la implacable injusticia en su natal Irán.
En Estambul trabajó en restaurante e intentó hacerse un espacio en el modelaje, pero varias puertas se le cerraron porque sus poses aparentemente eran vulgares en un país que también es conservador.
“Me teñí el pelo de rojo y la gente me gritaba por la calle. Las mujeres eran las peores, una incluso me mordió”, reveló.
De esa ciudad, la mujer contó además a Efe que emigró hacia París en busca de nuevas oportunidades y al ingresar como turista se quedó bloqueada sin poder trabajar y sin ahorros.
“Todos me iban echando de sus casas porque no me acostaba con ellos. Un día me decían que me amaban y, como no funcionaba, me recomendaban que me metiera en la prostitución”, confesó.
Narró que, incluso, uno de ellos la invitó a dormir frente a la Torre Eiffel. “Nunca en mi vida me acostaría con alguien a cambio del éxito. Le dije que no, si quería ayudarme que lo hiciera, pero que no quería pasar una semana romántica con él”.
Su historia llegó a trascender a medios de comunicación galos, hasta el punto de que en un trino Christophe Castaner, ministro del Interior francés, escribió que después de analizar su situación, se le propondría asilo. Y así fue como comenzó en firme su carrera como modelo.
Hoy, a sus 29 años, con el permiso de trabajo en las manos, Negzzia espera por fin modelar para reconocidas agencias.
En esa vía sigue dando de qué hablar en su carrera, pues alimenta día a día su portafolio de fotos en su cuenta de Instagram, que ya supera los 127 mil seguidores.
