Por: Maria Alejandra Barrios

Las enfermedades reumáticas no deberían ser ningún impedimento para mantener relaciones sexuales placenteras. Para nadie es un secreto que esta condición puede afectar diversos aspectos de la vida, debido al desgaste del aparato orgánico, entre esos, la sexualidad, trayendo con ella problemas físicos, emocionales y de pareja.

Es por eso que en diálogo con LA LIBERTAD la doctora Isabel Velásquez Arango, experta en sexología clínica y sexualidad humana nos compartió algunos consejos que permitirán que estas personas puedan disfrutar más de su intimidad.

Inicialmente, recordemos que las enfermedades reumáticas se definen como una amplia gama de anomalías, algunas de ellas relacionadas al desgaste del aparato locomotor (huesos, músculos, articulaciones, tendones y ligamentos) y otras originadas por la alteración del sistema inmunológico. Existen aproximadamente 100 enfermedades definidas, las más conocidas son la artrosis, la artritis reumatoide y la fibromialgia.

Los factores que influyen en la actividad sexual de las personas diagnosticadas con enfermedades reumáticas son: dolor, cansancio, rigidez muscular y articular, discapacidad funcional, depresión, ansiedad, imagen negativa del cuerpo, libido disminuida, alteración hormonal y algunos fármacos.

Según la publicación ‘Sexualidad y Enfermedades Reumáticas’ de la Sociedad Española de Reumatología, se indica que los problemas sexuales en estos pacientes varía entre 36 y 70 por ciento, aumentando con la duración de la enfermedad. Es por eso que recomiendan planear la actividad sexual de acuerdo con el deseo y la condición física. Así como mantener una comunicación clara con la pareja sobre los sentimientos, deseos, juegos y necesidades sexuales, reconociendo la importancia de los mimos y caricias.

“Independientemente que la persona tenga o no enfermedades reumáticas, la mayoría de la población se puede ver afectada psicológicamente frente a su relacionamiento sexual por la mala educación, ya que tenemos un concepto de placer errado. Siempre nos han hablado de esto como algo muy romántico de esas que vemos solo en las películas, pero no nos enseñan aquellas etapas de enamoramiento”, argumentó la doctora Velásquez.

Además agregó que una enfermedad reumatológica puede que ocasione muchas dificultades a nivel físico, pero nada que no tenga un posibilidad de ser diferente. Cuando se está realmente enamorado se hace maravillas ya que se activa el parasimpático, por lo que podemos ser capaces de hacer miles de cosas; la enfermedad no afecta todas las posiciones y partes del cuerpo, por esto es significante dejar a un lado la mala educación, debido a que esta desde hace mucho tiempo viene causando falsos ideales sobre la relación íntima, en especial a las mujeres, “porque nos han dicho que el placer sexual es algo que el otro lo tiene que proveer, pero en realidad es algo que está en cada uno y es la misma persona quien lo tiene que activar”, resaltó la experta.

Es de vital importancia autoconocer nuestro propio cuerpo, “si yo no conozco lo que me produce placer cómo voy a alimentar mis ganas”, complementando que es sano probar y experimentar, haciendo un recorrido de “yo con yo” para conocer lo que te gusta y lo que no, y de esta forma poder alcanzar el placer esperado. En caso de querer hacer el recorrido corporal con tu pareja no dudar en compartirle todo lo que sientes y te excita, para que puedan tener un mejor momento de intimidad.

Para la sexóloga Velásquez Arango “hay muchas alternativas que pueden mejorar la actividad sexual de las personas, independientemente de si se sufre una enfermedad reumatológica o no. Se puede ser creativo, cambiar los hábitos frecuentes y abrir la mente buscando ayuda con un especialista en sexualidad, para ampliar las posibilidades y tener unos encuentros sexuales más positivos, placenteros y saludables”. Asimismo, recomienda planear actividades sexuales de acuerdo con el deseo y la condición física, manteniendo una comunicación clara con tu pareja sobre los sentimientos, juegos y necesidades.

Añade la especialista que la pareja del paciente reumático siempre podrá aportar para mejorar la vida sexual. Es importante acompañar al paciente en el proceso médico para tener un conocimiento amplio de cuáles son las limitaciones que causa la enfermedad frente a la práctica de los encuentros sexuales y así aprender a reconocer los mejores momentos para ajustar las expectativas de ambos.

Tenga en cuenta las siguientes recomendaciones dadas por la experta:

• Tomar los analgésicos prescritos, media hora antes de tener relaciones, para prevenir la aparición inoportuna del dolor.
• Utilizar lubricante íntimo diseñado para encuentros sexuales ayuda a disminuir las molestias por resequedad de las mucosas durante el coito.
• Tomar, previo a la actividad una ducha caliente, y en zonas de baja temperatura utilizar un calentador de ambiente o una cobija eléctrica, para mantener un ambiente agradable.
• Buscar imágenes de posiciones sexuales que ayuden a evitar el dolor.
• Mantener una actitud positiva.

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