El cantante vallenato Nelson Velásquez protagonizó un acalorado reclamo contra la aerolínea Avianca, luego de que se le informara que no había cupos disponibles para él y su grupo de músicos, a pesar de contar con reservas confirmadas. En un video que se ha viralizado, el artista expresó su molestia con palabras duras hacia el personal de la aerolínea, calificando su proceder como «vivezas» y «patrañas».


El reclamo de Velásquez: ¿Indignación o conducta inapropiada?

En la grabación, Velásquez critica a la aerolínea por suponer que no llegarían a tiempo al vuelo, y exige una solución inmediata. Frases como “Ustedes no se merecen ningún respeto” y “Necesito que me resuelva esto ya” reflejan su frustración. Incluso llegó a mencionar que llamaría a la policía para resolver la situación.

La aerolínea, por su parte, aseguró que el incidente ocurrió hace más de un mes y no fue causado por una sobreventa de boletos. Avianca aclaró que asistieron al cantante y su equipo para abordar un vuelo hacia Ipiales tras una conexión desde Medellín, y que el retraso del vuelo fue de solo 10 minutos.


Un problema recurrente en Avianca

El caso de Velásquez no es un hecho aislado. En 2024, otras figuras públicas como Martha Isabel Bolaños, Aida Bossa y Faustino ‘El Tino’ Asprilla también han manifestado quejas contra Avianca por situaciones similares. La aerolínea enfrenta además un creciente problema de pasajeros disruptivos: en lo que va del año, han reportado 402 incidentes de este tipo, un aumento del 16% frente a 2023.


Avianca pide sanciones más severas

Ante el aumento de estos casos, Avianca solicitó a las autoridades implementar regulaciones más estrictas que sancionen de manera efectiva el comportamiento disruptivo, incluyendo la posibilidad de prohibir o suspender el derecho a volar de pasajeros problemáticos. La compañía reafirmó su compromiso con la seguridad y bienestar de pasajeros y tripulantes, rechazando cualquier tipo de agresión, ya sea verbal o física.


Reflexión sobre el trato entre aerolíneas y pasajeros

Este incidente pone de manifiesto la necesidad de un equilibrio entre los derechos de los pasajeros y el respeto hacia el personal de las aerolíneas. Si bien las quejas de figuras públicas como Velásquez exponen fallas en la experiencia de viaje, también resaltan la importancia de mantener una conducta respetuosa y buscar soluciones mediante el diálogo. La relación entre usuarios y aerolíneas debe basarse en la empatía y el cumplimiento mutuo de responsabilidades para garantizar un servicio eficiente y seguro.