La metanfetamina azul, elemento central en la trama de «Breaking Bad», fue recreada con tal realismo que en varias ocasiones desapareció del set debido a su apariencia convincente. Robb Wilson King, diseñador de producción de la serie, reveló que para lograr este nivel de autenticidad, consultó tanto con agentes de la DEA como con traficantes reales en Albuquerque, donde se filmó la serie. Estas interacciones permitieron al equipo acceder a vecindarios y casas utilizadas para la fabricación de metanfetamina, brindándoles una comprensión profunda del entorno que buscaban recrear.
Para garantizar la seguridad de los actores y mantener la veracidad visual, el equipo de producción utilizó alternativas seguras en la creación de la metanfetamina falsa. Según Robb Wilson King, la metanfetamina de cristal azul utilizada en «Breaking Bad» en realidad era caramelo de roca azul o cristales de azúcar. Esta elección no solo aseguraba la seguridad en el set, sino que también proporcionaba una apariencia auténtica en pantalla.
El compromiso del equipo de producción con la autenticidad y la seguridad fue fundamental para el éxito de «Breaking Bad». Su atención meticulosa a los detalles y la colaboración con expertos y comunidades locales permitieron una representación realista y respetuosa de la cultura y los desafíos asociados con la fabricación de metanfetamina.
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