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Roy Vergara Munarriz
Colaborador
Junior mejoró mucho ante el Once Caldas y se le comienza a ver la mano al venezolano César Farías. Nadie puede negar que se le puede dar mérito a este triunfo ante un equipo de manizales que venía con dos partidos sin conocer la derrota con una victoria y un empate.
El tiburón termina ganando bien en el Metropolitano con un marcador de 2-0. Dos buenos goles generados por Bryan Castrillón en el primer tiempo con un remate dentro del área. El mediocampista entró con alternativa luego de la lesión que sufrió Deiber Caicedo y quién se iba a imaginar que el antioqueño iba a terminar como una de las figuras del compromiso.
El segundo gol también llega con una gran definición del mediocampista José Enamorado. Lo que más me gustó de esta Victoria es que vimos a un Junior más organizado y preparado. Mentalizado en sus líneas y al parecer César Farías llegó a entender que jugadores como Caicedo y Enamorado deben ser siempre titular. Once Caldas es un gran equipo y realizó un gran compromiso. Junior hizo un gran partido y dio la sensación desde el comienzo que en cualquier momento iba a llegar el gol que diera la alegría a los aficionados.
Es importante resaltar también lo realizado por los laterales Guerrero y Navia, quienes oxigenaron al equipo, también lo del central Báez que muestra temple. Muy seguramente en el futuro vamos a ver los goles de Carlos Bacca y Steven ‘Titi’ Rodríguez. César Farías leyó bien el partido y lo cambios lo demostraron. Ahora hay que buscar el triunfo en Tunja ante Boyacá Chicó. Amanecerá y veremos…