La Selección Colombia afronta un partido crucial en las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial 2026, cuando reciba a Bolivia en el Estadio Metropolitano Roberto Meléndez de Barranquilla a las 6:30 p. m. Este encuentro tiene un valor especial, ya que un triunfo podría dejar a los dirigidos por Néstor Lorenzo prácticamente clasificados a la próxima cita orbital, consolidando el camino hacia el objetivo que persigue toda la nación futbolera.

Colombia llega a este compromiso ubicada en la sexta posición de la tabla, con 22 puntos, lo que actualmente le permite estar dentro del grupo de clasificados directos. El equipo, que ha mostrado un desempeño estable bajo el mando de Lorenzo, necesita ratificar su fortaleza como local para despejar cualquier sombra de incertidumbre en la recta final de la eliminatoria. Una victoria en casa no solo le aseguraría un lugar privilegiado, sino que también daría confianza de cara a los partidos restantes.

Por su parte, Bolivia ocupa la octava posición con 17 unidades y mantiene vivas sus opciones de aspirar al repechaje. Aunque su situación es más compleja y depende de resultados externos, el equipo dirigido por Antonio Carlos Zago llega con la obligación de sumar en condición de visitante. Para los bolivianos, este compromiso representa un reto mayúsculo, pero también una oportunidad para reavivar la esperanza.

En cuanto al historial, las estadísticas favorecen ampliamente a la selección colombiana. En los últimos cinco enfrentamientos, Colombia logró tres victorias, un empate y solo una derrota. De manera global, la Tricolor acumula once triunfos frente a dos de la Verde, lo que refuerza la idea de que los cafeteros parten como claros favoritos. Además, modelos de predicción deportiva proyectan marcadores probables entre 2-0 y 3-1 a favor de los locales.

El Metropolitano, considerado el fortín del equipo nacional, volverá a vibrar con los colores amarillo, azul y rojo. La afición espera una fiesta que combine el apoyo incondicional y la ilusión de celebrar la clasificación de manera anticipada. La nómina cuenta con jugadores experimentados y el regreso de piezas claves en el ataque, lo cual alimenta las expectativas de un espectáculo ofensivo.

No obstante, Bolivia ya demostró en la altura de La Paz que puede complicar a Colombia, al imponerse con un triunfo ajustado en la primera vuelta. Esa victoria le da argumentos al conjunto visitante para soñar con dar la sorpresa en Barranquilla, aunque el reto de enfrentar a la selección colombiana en su estadio siempre ha sido una de las pruebas más duras del continente.

El duelo también tiene un componente emotivo, ya que podría representar la última presentación de James Rodríguez con la camiseta de la Selección en el Metropolitano. El capitán y referente de la última década, cuya continuidad en el equipo está en duda, se despediría de su público en un escenario que lo ha visto crecer y brillar. Por ello, la hinchada vivirá con emoción y nostalgia la posible despedida de uno de los grandes ídolos del fútbol colombiano.

En conclusión, el partido entre Colombia y Bolivia es más que un simple encuentro eliminatorio: es la oportunidad de consolidar un sueño, de ratificar la fortaleza como local y de rendir homenaje a una generación que marcó historia. Barranquilla se alista para ser, una vez más, el epicentro de la ilusión mundialista.