La exesposa de Daddy Yankee, Mireddys González, presentó este lunes una nueva demanda en el Tribunal Federal de San Juan, Puerto Rico, en la que reclama el pago de 50 millones de dólares al artista urbano. En la acción legal, González acusa al cantante de haber diseñado y ejecutado un plan para incumplir un acuerdo previo alcanzado en octubre, relacionado con la administración y distribución de fondos provenientes de las corporaciones vinculadas a la carrera del músico.
Según el documento judicial, las empresas El Cartel Records y Los Cangris, Inc. aprobaron y ejecutaron en diciembre de 2024 resoluciones corporativas mediante las cuales se declararon dividendos por un total de 100 millones de dólares. Dichos fondos debían ser divididos en partes iguales entre los dos accionistas: 50 millones de dólares para Mireddys González y 50 millones para Ramón Luis Ayala Rodríguez, nombre legal de Daddy Yankee. Las resoluciones especificaban que el dinero sería depositado directamente en las cuentas personales de ambas partes en Oriental Bank.
La demanda detalla que las transferencias se realizaron y que los 50 millones de dólares correspondientes a González fueron acreditados completamente en su cuenta bancaria. Sin embargo, menos de 24 horas después, esos fondos fueron revertidos y eliminados sin su autorización. Para la demandante, esta acción no fue un error administrativo, sino el resultado de un plan coordinado entre el artista y FirstBank con el objetivo de privarla de un dinero al que, según alega, tenía pleno derecho legal.
En ese contexto, González sostiene que Daddy Yankee instruyó, presionó o influyó directamente para que FirstBank revirtiera los fondos, a pesar de que, de acuerdo con la querella, el cantante no contaba con autoridad de firma, facultad corporativa ni capacidad legal para alterar o cancelar transacciones ya aprobadas y ejecutadas por las corporaciones. Por esta razón, tanto FirstBank como Oriental Bank fueron incluidos como codemandados en el proceso judicial.
Ante estos hechos, la demandante solicitó la restitución inmediata de los 50 millones de dólares, así como daños compensatorios y estatutarios. Además, pidió la emisión de interdictos que impidan futuras interferencias, una declaración judicial que establezca que la reversión de los fondos fue ilegal y no autorizada, y que se determine la responsabilidad solidaria de los bancos y aseguradoras involucradas.
Este nuevo pleito se suma a una prolongada disputa legal y empresarial entre Daddy Yankee y su exesposa. El 10 de octubre, los representantes legales de ambas partes alcanzaron un acuerdo que permitió al artista continuar utilizando sus marcas profesionales, incluido su nombre artístico y seudónimos como las siglas DY, que ha empleado tras anunciar su retiro musical. Dicho acuerdo fue uno de los episodios más recientes del conflicto iniciado meses atrás.
La controversia comenzó formalmente cuando, el 14 de agosto, la jueza federal Silvia Carreño ordenó a González entregar dispositivos electrónicos que contenían correos y archivos supuestamente borrados de El Cartel Records. Posteriormente, Daddy Yankee demandó a su exesposa y a su excuñada Ayeisha González por presunta destrucción de documentos corporativos. La disputa por las empresas se intensificó tras conocerse que en diciembre de 2024 se realizaron transferencias por 100 millones de dólares desde cuentas corporativas a cuentas personales, sin conocimiento ni autorización del cantante. La separación de la pareja se confirmó en esas fechas y el divorcio se hizo oficial el 19 de febrero, tras casi 30 años de matrimonio y dos hijos en común.
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