Por Lino Villanueva
En el municipio de Piojó se está desarrollando actualmente un gran movimiento ecológico, turístico y cultural. Desde el turismo de naturaleza, turismo rural y sus subtipos como es el senderismo, ecoturismo, el avistamiento de aves, y también el turismo de aventura. Por el privilegio de estar ubicado sobre la montaña más alta del departamento del Atlántico, Piojó cuenta con un agradable clima, paisajismo abundante y se disfrutan allí sus espectaculares amaneceres. Tiene la fortuna de poseer extensas zonas de bosque seco tropical, que se caracteriza por purificar el aire que se respira. Este bosque es uno de los más diversos del departamento. Muestra una biodiversidad significativa de fauna silvestre, como el Tití Cabeciblanco, el Mono Cotudo, el Mono Capuchino y el Oso Perezoso. Estos animales se encuentran en las formaciones montañosas del Cerro de La Vieja, Machín, Macondal y en las áreas del Palomar. En el arroyo Guacaribana y en algunas zonas planas cerca a la ciénaga del Totumo hay parches con concentración de biodiversidad bien conservada. Además, el grupo de aves: Guacamayo Pechiamarillo, Guacamayo Rojo, Tucán y Guacharaca.
En tamaño físico Piojó es el segundo municipio con la extensión territorial más grande del departamento de Atlántico. Contar a su vez con un territorio amplio y una población baja, ofrece un valor agregado para el desarrollo de la actividad ecoturística, tales como tranquilidad, poca presencia de vehículos, por consiguiente, menos contaminación sonora y atmosférica, más seguridad y cero homicidios o delitos comunes.
Sus principales sitios atractivos para el desarrollo del ecoturismo son:
La Reserva natural del Palmar del Tití: Una superficie de 2.622 hectáreas, comprendidas entre Luruaco y Piojó.
El Cerro de La Vieja: Lugar favorito para el avistamiento de aves. Se encuentra fuera del perímetro urbano, es el sitio más alto del departamento del Atlántico, con una altura de 514 metros sobre el nivel del mar, convertido en una gran reserva de flora y fauna. Con un clima agradable, desde este sitio se pueden observar las mejores vistas del Atlántico.
La Reserva natural el Palomar: Sitio de habitación de animales en vía de extinción como el mono tití, el mono saíno, el mono cotudo y los guacamayos.
El Parque Los Mameyales: Es un sitio de reserva de vegetación en el cual sobrevive una variedad de ranas de color amarillo y negro -esta especie se ve únicamente en Piojó-, además de vegetación silvestre y atrayente flora y fauna. Las especies presentes en el Parque Mameyales son: El Tití Cabeciblanco (Saguinus oedipus), El Mono Cotudo (Alouatta palliata), El Mono Capuchino (Cebus capucinus), Guacamaya pechiamarilla (Ara ararauna), Guacamaya Roja (Ara macao), Tucán (Ramphastos sulfuratus), El Oso Perezoso (Choloepus didactylus)
La Reserva natural Los Charcones: Sitio balneario con aguas vivas y mansas.
También se destacan el centro recreacional Calvaduría, la eco granja La Garita, el eco hotel Balcones de la Reserva y el parque temático más grande del Caribe, llamado Caribe Aventura, que garantiza un flujo de un millón de turistas anuales.
El municipio de Piojó tiene dos kilómetros de playas (Punta Astilleros), con remanentes de manglar, dunas y algunas formaciones estuarinas.
La Corporación Regional Autónoma del Atlántico CRA, durante los últimos años ha realizado estudios dirigidos a identificar las prioridades de conservación del departamento, identificando preliminarmente catorce (14) áreas para ser preservadas bajo alguna categoría de conservación, regional o municipal. De estas áreas, nueve (9) se encuentran ubicadas en la subregión Costera-Turística y cinco (5) en el municipio de Piojó, lo que denota el importante potencial que tiene esta subregión desde el punto de vista ecoturístico.