Con un espectáculo lleno de emoción, talento y sentido de pertenencia, el Centro de Formación Musical de Cajamag celebró la clausura del semestre académico en un evento memorable llevado a cabo en el Teatro Cajamag “Pepe Vives Campo”. Esta gala artística reunió a estudiantes, familias y miembros de la comunidad samaria en torno a un homenaje musical a la ciudad de Santa Marta, en el marco de sus 500 años de historia.
El evento fue protagonizado por niños, niñas y jóvenes que forman parte de los distintos cursos de formación musical que ofrece Cajamag. Cada presentación fue una muestra del trabajo, esfuerzo y aprendizaje acumulado durante el semestre, y reflejó la calidad de la enseñanza impartida en el centro. Lejos de ser un recital convencional, la clausura se diseñó como una obra de teatro musical con narrativa integrada, lo que permitió al público embarcarse en un recorrido artístico y sonoro por los principales momentos históricos y culturales de la capital del Magdalena.
El programa incluyó interpretaciones en diversos instrumentos como piano, violín, acordeón y percusión, además de destacadas actuaciones vocales. Todas las piezas musicales fueron interpretadas por los propios estudiantes, quienes mostraron un dominio sorprendente para su edad, lo que generó una gran admiración entre los asistentes. Las actuaciones de los más pequeños emocionaron al público por su ternura y carisma, mientras que los adolescentes y jóvenes se destacaron por su técnica, madurez interpretativa y capacidad escénica.
Una de las características más valoradas del evento fue la capacidad del montaje para conectar el aprendizaje musical con el patrimonio sonoro de la ciudad. A través de la música, se rindió tributo a los ritmos que han dado identidad a Santa Marta durante cinco siglos, generando en los asistentes un sentido de orgullo cultural. Así, el evento se convirtió en una auténtica celebración de la historia samaria a través del arte y la pedagogía.
La puesta en escena fue ovacionada por un público mayoritariamente compuesto por padres de familia, quienes siguieron cada intervención con entusiasmo y orgullo. Muchos de ellos expresaron su agradecimiento a los docentes y directivos del Centro de Formación Musical por fomentar en sus hijos valores como la disciplina, la sensibilidad artística y el amor por la cultura local.
Más allá del cierre del ciclo académico, el evento también sirvió como una plataforma para reafirmar el compromiso del centro con la formación integral de niños y jóvenes. En Cajamag, la enseñanza musical no se limita a la técnica instrumental, sino que se concibe como una herramienta de desarrollo humano, identidad cultural y transformación social. En sus aulas, los estudiantes no solo aprenden a interpretar melodías, sino que también construyen autoestima, aprenden a trabajar en equipo y fortalecen su creatividad.
La institución, además, aprovechó la ocasión para invitar a nuevos participantes a vincularse a su oferta educativa. Desde Cajamag se hizo un llamado a los afiliados, hijos de afiliados y demás miembros de la comunidad a sumarse a esta propuesta formativa que va más allá de lo artístico. La experiencia educativa del Centro de Formación Musical ha demostrado ser una herramienta valiosa para potenciar el talento local y consolidar procesos culturales sostenibles en Santa Marta.
En conclusión, la clausura del semestre académico del Centro de Formación Musical de Cajamag no fue solo una muestra de lo aprendido, sino una emotiva manifestación de cómo la educación artística puede conectar generaciones, rescatar la memoria colectiva y enriquecer la vida comunitaria. Con eventos como este, se consolida el papel de Cajamag como un actor clave en la promoción cultural y en el fortalecimiento del tejido social samario.
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