Por: Redacción.
Custodiada por la Policía Militar y bajo un fuerte toque de queda continúa el corregimiento de Santa Cruz, en Luruaco, luego de la asonada en el día de ayer a raíz del asesinato de Antonio Abel Ávila Cabrera, que ocasionó la muerte de otras dos personas más.
El comandante de la Policía del Atlántico, coronel Henry Orlando Jiménez Alba, indicó que aunque en la zona situación de orden público transcurre en total normalidad, se mantienen los operativos de seguridad por parte de funcionarios del Ejército, la Policía y el Esmad.
Además, el alto oficial indicó que se adoptarán medidas de seguridad para el funeral de las víctimas Antonio Abel Ávila Cabrera, campesino desmembrado; Javier Vásquez, quien recibió un balazo en el rostro en medio de la asonada registrada en el corregimiento y Keiner Pérez Cabrera, uno de los señalados responsables que fue atacado a machete por la turba enardecida.
Para hoy el gobernador del Atlántico, Eduardo Verano De la Rosa, el mayor general William René Salamanca, director de Seguridad de la Policía, el alcalde de Luruaco, Antonio Roa, y demás autoridades del Atlántico, se reunirán nuevamente para analizar los hechos violentos ocurridos y escuchar testimonios de la comunidad.
Las autoridades manifestaron que por estos hechos aún no hay personas capturadas. Sin embargo, uno de los señalados por la comunidad como presunto responsable del asesinato del adulto mayor, fue retirado de la población para evitar que fuera agredido.