Por: Redacción
Una nutrición balanceada es la base o el comienzo de un estilo de vida más activo y saludable. Para que esto no se convierta en un reto imposible de superar, es clave distribuir las comidas y balancearlas con alimentos que aporten variedad de nutrientes, entre ellos la proteína.
Este nutriente es esencial para el correcto funcionamiento del organismo puesto que contribuye a la formación de estructuras encargadas de realizar funciones internas como el transporte de oxígeno, la formación de enzimas y la transformación de los alimentos en energía para llevarla a todos los órganos.
De acuerdo con Carlos Ulloa, médico del deporte e integrante del Consejo Consultor de Nutricionistas de Herbalife Nutrition, dentro de los beneficios de la proteína; también se encuentra el apoyo al mantenimiento de la masa muscular, lo que permite que las personas puedan realizar diferentes actividades durante el día con más facilidad.
“Al consumir cantidades suficientes de proteína y otros macronutrientes, y junto con la actividad física construiremos más masa muscular y repararemos mejor todos los tejidos. Adicionalmente, si aumentamos el consumo de proteínas veremos, en el marco de una dieta reducida en calorías, un aumento y disminución proporcionales en la masa muscular y el porcentaje de grasa respectivamente”, agrega Ulloa.
Después de conocer la importancia de la proteína y sus beneficios, te proponemos opciones de cómo consumirla, en qué momentos del día y con qué alimentos. Para esto, Clara Lucía Valderrama, nutricionista, recomienda consumir proteína en todas las comidas del día.
“La cantidad de proteína que debe consumirse varía y depende de diversos factores, pero lo ideal es distribuir su consumo a lo largo del día, en cinco comidas: desayuno, almuerzo, cena y meriendas o refrigerios; así el cuerpo podrá aprovecharla al máximo”, asegura Valderrama.
¿Cómo incluirla en cada uno de los tiempos de comida?
Tanto en alimentos de origen animal -carnes, aves, pescados, huevos y lácteos (leche, yogur, quesos) – como vegetal -leguminosas como soya, fríjol, lentejas, arvejas, garbanzos, quinoa, entre otros- se puede encontrar proteína. Sin embargo, hoy se encuentran diversos productos en el mercado como batidos, barritas, trocitos crocantes y hasta bebidas refrescantes que se pueden incluir en los refrigerios.
“Los refrigerios son una comida muy importante porque pueden permitir un mejor control de las porciones; estos alimentos que consumimos entre las comidas principales sirven para obtener más energía, completar la ingesta de nutrientes y mantener los niveles de saciedad y de glucemia”, asegura la nutricionista.
Se tiene la creencia de que los refrigerios deben ser algo para masticar, pero ahora se tienen más opciones como las bebidas refrescantes.
“Las bebidas se convierten también en una excelente opción para incluir proteína en el día y con las nuevas opciones, se puede tomar en bebidas refrescantes en días calurosos o después de la actividad física”, agrega la especialista.
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