Por: Valeria Tuiran

El término ‘emprendimiento’ se ha venido utilizando desde hace muchas décadas atrás, a pesar de esto para muchos resulta bastante nuevo, no solo sus letras, sino también lo que realmente significa. Este es un proceso listo para cambiar al mundo, que a pesar de la coyuntura vivida por el Covid-19 y el fuerte golpe que recibió la economía a nivel mundial, ha permitido generar nuevas ideas de negocios de distintas características y servicios, dando a conocer oportunidades interesantes para satisfacer las necesidades de los individuos, donde el ingenio y la creatividad de cada quien le dan paso a propuestas que, en algunos casos, pueden resultar en cambios totales para nuestra sociedad.

 Emprender no es una tarea sencilla, por eso, en exclusiva con Diario LA LIBERTAD, Ignacio José Negrette Escobar, director de un centro de innovación y emprendimiento, nos aclara ciertas dudas que surgen alrededor de este tema, dejando en claro que desde su punto de vista el emprendimiento no es necesariamente darle inicio a un negocio; pues también se es emprendedor cuando se logra detectar problemas, oportunidades, identificar soluciones y ejecutarlas.

En la actualidad, el apoyo a las personas emprendedoras ha ido en incremento, pues cada día esta iniciativa tiene mucha más presencia en las regiones; sin embargo es importante conocer y detectar ideas factibles para emprender cuando de negocios se trata.

Para darle inicio a nuestro emprendimiento, primero que todo se deben tener claro dos cosas, la primera es conocer con exactitud los anhelos y necesidades de los individuos, determinando un nicho de mercado (grupo), para luego en función de esto crear soluciones; nunca se debe crear un empresa sin antes haberle dado la prioridad a determinar lo ya antes mencionado.

Lo segundo, está relacionado con nuestro nivel interno y requiere tres competencias: la humana, es decir algo que nos permita vender, relacionarnos y liderar; un componente técnico, el cual consiste en contar con un equipo preparado para nuestro negocio y por último, se necesitan conocimientos o habilidades administrativas que nos ayuden a organizar nuestras finanzas.

Afortunadamente hoy en día los emprendedores son menos adversos al riesgo, ya que se encuentran un poco más preparados para emprender debido a que las universidades han venido incluyendo en sus pénsum las asignaturas de emprendimiento y a parte han adoptado esta cultura, facilitando espacios y charlas en lo que se conozca un poco más a cerda del tema.

Aún así, existe la posibilidad de sentir temor e inseguridad al momento de lanzarnos a esta aventura enriquecedora, es por esto que el experto recomienda contar con el acompañamiento de un mentor con el que se puedan esclarecer inquietudes y/o compartir experiencias de distintas situaciones que orienten en algunas decisiones futuras.

Para emprender no necesariamente se necesita una metodología y tampoco se es un completo conocedor luego de leer un libro a cerca de esto, en este proceso existen puntos significativos como lo es el ‘ajustar’, ajustarse a lo que el mercado requiere es la clave.

Para eso es necesario tener en cuenta los siguientes pasos:

1.Conocer la necesidad del individuo

2.Analizar quiénes tienen el problema

3.Proponer una solución y venderla Es de vital importancia validar cada uno de los procesos ya antes mencionado y ajustar todo lo necesario para así poder seguir con la idea principal.

Luego se continúa con la revisión del modelo de negocio; en este punto se debe definir de qué manera se generarán ingresos, actividades claves, factor diferenciado y se realiza una prueba final en el mercado para determinar una inversión y finalizar con éxito el objetivo propuesto.

“Si se desea ser un buen emprendedor, es momento de hacer a un lado un mito que lamentablemente es el más común, y es que muchas veces se tienen proyectos en mente, pero decidimos mantenerlos en silencio por miedo a que sean “robados”, se debe tener siempre en cuenta que si se tiene una muy buena idea y para poder ejecutarla debe ser compartida, no hay que dudarlo; es precisamente esto lo que diferencia a un buen emprendedor, de uno no tan bueno”, dijo el experto Ignacio Negrette.

 Cada día son más las personas que deciden iniciar un emprendimiento e innovar, que asumen este reto para buscar un cambio, responder a él y utilizarlo como oportunidad. Nunca será tarde o muy temprano para darle paso este camino que debe tener como fin buscar y descubrir pequeñas o grandes cosas que ofrezcan un bienestar a nuestra sociedad.

#cadenaradiallalibertad