Por: Redacción.

El nuevo Código Disciplinario (Ley 1952), firmado por el presidente Iván Duque el pasado 28 de enero ha despertado pánico electoral entre varios aspirantes a cargos públicos para las próximas elecciones al tener consecuencias inesperadas en las campañas con rumbo a importantes alcaldías y gobernaciones.

En su artículo 43, el nuevo Código establece que los concejales o diputados tendrán incompatibilidad para aspirar a cargos de elección popular en el ente territorial donde han ejercido si no han renunciado un año antes.

Esto, en cuentas claras, podría dejar por fuera de las próximas elecciones de octubre a la mitad de los aspirantes actuales que ya se asoman al sonajero político. En Bogotá, por ejemplo concejales como Hollman Morris, de la izquierda, o Diego Molano y Ángela Garzón, en el Centro Democrático, podrían estar inhabilitados.

En Valledupar, por ejemplo, podría quedarse por fuera José Santos ‘El Mello’ Castro, quien es precandidato a la alcaldía de Valledupar y anunció su retiro de la Asamblea el próximo dos de marzo.

Según como se presenta el panorama político para este año 2019, podemos entrever que lejos está de esas épocas en donde de forma apresurada o adelantada, los ciudadanos por si mismos podían intuir quienes llegarían sin problema alguno a disputar el poder que finalmente los dejaría a cargo de la administraciones